ARGENTINO B
Luque será el responsable de cuidar el arco del equipo de Oliver. Con 35 años y con más de doscientos partidos como titular, viene con el deseo de conseguir un ascenso.
Fuente: Jornada
El arquero retorna a la zona con la misma ambición: lograr un ascenso de categoría.
El arquero Diego Luque, viene con todas las buenas intenciones de perdurar en la historia “aurinegra”. Un nuevo desafío en su vida, fueron motivos claros, para asegurar su llegada a la institución de la Avenida Roca, luego de la propuesta de trabajo realizada por el técnico y dirigentes del club Deportivo Madryn. “Es una nueva motivación en este momento de mi vida, sustentada por el deseo íntimo de volver a la ciudad de Puerto Madryn y saber las sanas intenciones de armar un equipo por demás competitivo. Todos saben que a mi familia le costó mucho dejar esta ciudad, fundamentalmente porque uno se encariña con la ciudad, hace nuevos amigos y lo hacen sentir una persona querible. Nos costó mucho salir. Y sin embargo ahora fue una motivación linda para aceptar esta nueva propuesta”.
Para el “uno”, seguir teniendo desafíos a esta altura de su carrera es brillante. “Más allá de una fuente de trabajo, creo que he demostrado en los últimos dos o tres años de carrera, que mantengo mi profesionalidad. Siempre he trabajado para permanecer en categorías superiores, pero no debe desmerecer otras categorías y menos cuando hay instituciones, que hacen un gran esfuerzo dirigencial y económico para avanzar. Ojalá que se de esta chance de conseguir lauros como los que uno cosechó en Guillermo Brown. Lo deseo desde lo personal pero también por el esfuerzo de mucha gente que ha formado un grupo competitivo. Estas primeras horas de trabajo son claves. Y el cuerpo técnico demostró un gran conocimiento de causa”.
Referente
Su experiencia y su don de buena persona lo empezaron a demostrar a minutos de iniciada la pretemporada. Currumil y Barroso, los pibes del club, se “apichonaron” a su lado. Señal de saber escuchar y aprender de quienes saben mucho de esto. Para Luque, esto es maravilloso aunque “sé que muchos van a ver a en mí a y a otros muchachos como referentes del equipo por nuestra edad y por nuestro trabajo. Deben saber que uno viene a aportar su granito de arena, que el progreso de los jóvenes depende de sí mismos. Por supuesto que en el fútbol no hay lógicas. Ya no se gana con nombres, sino con muchísimo trabajo físico, acomodarse a lo que pretende el técnico e ir despacio, bajando decibeles, porque ya siente la gran expectativa creada. El deseo de que las cosas salgan bien es compartido por todos. Habrá que saber que tenemos que ir paso a paso”.
Reconoció que “estamos acostumbrados a los largos viajes. Ya sabemos quiénes serán los equipos que compartirán la zona con Deportivo Madryn, y que la competencia nos depara kilómetros quizás más monótonos, pero inevitables. Esto también ha ganado el progreso. Ahora se viaja en coche cama. Uno recordará los grandes esfuerzos de Guillermo Brown. Para esto hay que trabajar físicamente, saber interiormente que estamos preparados para esto, porque las intenciones, las pretensiones son por demás valederas. Uno viene a dar todo, a entregar todo para que se pueda tener un final feliz. Es como un mensaje indirecto también para el hincha, a sabiendas, que su aliento es permanente cuando las cosas salen bien y mucho más cuando salen mal. Falta mucho para la competencia. El tiempo necesario para conocernos y saber que juntos, podemos cumplir con creces este lindo desafío.
La Quimera 